El cuerpo es el cuerpo. Despertándome con esta reflexión
El cuerpo es el cuerpo, tan divino como carnal, tan paradisiaco como infernal.
El problema fue creer que el cielo era lo bueno y allí habitaba el dios bueno y el infierno era lo malo y allí habitaba el dios malo.
Cuando entenderemos que esas representaciones de lo bueno y lo malo son opuestas a la condición humana además de antinaturales, crepusculares, decadentes, psicopáticas y esquizas ya que dividen lo que no tiene línea de separación?
Cuando entenderemos que la construcción de estas fantasías y cuentos infantiles son indemostrables y además ejercen poder sobre nosotros desde la culpa y la represión?.
Cuándo entenderemos los mecanismos de control de las metafísicas oscurantistas para poder estar por encima de ellas y poder mirarlas hacia abajo, como quien conquista la cúspide de la montaña?
Cuándo será que sacaremos al diablo del cuerpo?
Cuándo será que sacaremos a dios del cuerpo?
Cuando será que habitaremos en nuestro cuerpos, en aquellos que nos han quitado?
Cuando será que retornaremos a la sexualidad sagrada?
El cuerpo, lugar de lo sacro y lo profano.
Psicóloga Alejandra Quintero R. – eldivanrojo@gmail.com