Bienestar integral, transformación y resiliencia.

Salud mental y salud sexual con enfoque de género

Estamos ubicados
Online y en Bogotá
Horarios
Lun a Vie - 8 am a 4 pm

Y las mujeres creen que las dejó el tren a los 25?


El día 28 de Septiembre de este año, contrajeron nupcias una mujer de 80 años con un joven de 24. Pese a las críticas que recibieron, su amor (o interés, aún no se sabe) siguió firme hasta tomar la decisión de unirse en matrimonio civil y aceptar su amor públicamente.

Me genera inquietud sobre si esto es una muestra de una conducta gerontofílica, específicamente de graofilia, por parte del joven o de rasgos anisonogámicos paidofílicos por parte de la señora? (jejeje, que trabalenguas esto de las parafilias, perdón, de las minorías eróticas o expresiones comportamentales de la sexualidad).

Independientemente de lo que sea, lo importante es que si ya tomaron la decisión de casarse, puedan llevar una relación armónica tanto a nivel afectivo, social, sexual, familiar y psicológico. Ojalá que si, yo les deseo lo mejor.

Todos somos perversos

Existen dentro de nuestras posibilidades de expresión sexual humana, ciertos comportamientos particulares que algunos llaman perversiones o aberraciones. La psicología ha evolucionado en ello y actualmente emplea el término: Expresiones comportamentales de la sexualidad, el cual designa a las mal llamadas perversiones sexuales.

No piense que este tema es exclusividad de “pervertidos” y que Usted no tiene porque estarlo leyendo. Aunque no lo crea, Usted también tiene expresiones comportamentales de su sexualidad que de pronto no imagina o no ha descubierto todavía.

Todos los seres humanos que vivimos en este planeta, o sea, su mamá, su papá, el alcalde, el sacerdote, el vecino, su hijo, Usted y yo, tenemos algo de fetichismo, necrofilia, voyerismo, sadomasoquismo, entre otros, todo depende del nivel en que nos hallemos. En este sentido, la sexología emplea 7 niveles en donde 1 y 2 son las expresiones que no implican comportamientos eróticos, ni la consecución del placer sexual, mientras que las personas que se hallan en nivel 7 sólo obtienen satisfacción sexual y logran el orgasmo únicamente mediante esa expresión comportamental.

Esto significa que si su pareja emplea técnicas de amarramiento como parte de un juego erótico, no significa que sea “técnicamente” un Bondage. Pero si sucede que su pareja solamente puede tener orgasmos cuando Usted se encuentre amarrado, lo más probable es que estemos frente a una persona Bondage.

Son fetichistas (obviamente en un bajo nivel) aquellos que son coleccionistas y adoran sus objetos. Son exhibicionistas aquellas mujeres que visten con escotes y minifaldas. Son necrofílicos los mexicanos que adoran a los muertos. Son masoquistas aquellos que les gusta estar en relaciones tormentosas. Podríamos enumerar muchos casos de este estilo, sin embargo, la pregunta es: ¿cuál es tu “perversión”?

Es muy triste ver y escuchar a las personas, que por la satanización de comportamientos sexuales diferentes a los tradicionales, mojigatos y “misioneros”, impiden, castigan y huyen de sí mismos o de su pareja, pues creen que están cometiendo algún pecado o están algo desajustados mentalmente.

Ten siempre presente esto: “en materia de comportamiento sexual las personas pueden hacer lo que deseen siempre y cuando no dañen a terceros, y que los que participen lo hagan voluntariamente y con conocimiento de las consecuencias de sus actos”

Ahora, en el campo real, en la vida práctica, imaginemos y sintamos. ¿Qué pasaría si tu pareja te propusiera amarrarte a la cama por unos momentos? ¿Si quisiera darte unas nalgadas? ¿Si quisiera ser dominado? ¿Si quisiera orinarte? ¿Si quisiera…?

Como trato de resaltar en mis artículos, la clave está en la comunicación, la cual parte de la escucha. Ante este tipo de propuestas debemos escuchar claramente lo que el otro desea y conocer los alcances que ello implica. En este paso que parece tan sencillo, muchos fallan, ponen resistencia, reaccionan, se afectan emocionalmente, no dejan hablar, lanzan juicios de valor y degradan al otro.

Una vez le hayamos brindado al otro su espacio de expresión nos toca decidir, si aceptar o no su propuesta. ¿Cómo decidir en estos casos? Sin estar bajo presión:

– Piense en su forma de ser, en su personalidad, en sus valores personales, en su historial sexual, en las cosas que podría estar dispuesto a hacer.

– Recuerde que Usted puede limitar, ampliar o cambiar el alcance de la propuesta.

– Proyéctese en la situación y piense de qué forma se sentiría.

– Piense en qué cambiaría la forma en que Usted se relaciona con su pareja.

– Y al final, concluya lo siguiente: ¿Cómo me sentiría? ¿Qué ventajas tiene? y ¿Qué perdería o cuáles son sus desventajas?

– Y no olvide algo: el hecho de no participar en estos tipos de propuestas no hacen que Usted sea aburridor o mal amante.

Siempre he considerado la Biblia como un libro de mucha sabiduría, por ello, retomo una frase que posiblemente en su tiempo no estaba pensada para estas aplicaciones y alcances, pero en este momento es válida y constituye mi consejo: “Descubrirlo todo y quedaros con lo bueno” San Pablo.

¿Y el Sadomasoquismo qué? Algunos apuntes…

El sadomasoquismo es la erotización del poder” Michel Foucault

Esta manifestación sexual recibe el nombre gracias al Marqués de Sade, pues obras como Justine, Juliette, Filosofía en el tocador, entre otras, recrean situaciones eróticas de generación de dolor. También debemos mencionar a Leopold Von Sacher-Masoch con su Venus de las Pieles, en el cual ilustra la satisfacción que se siente el ser agredido, de aquí la designación Masoquismo.

El sadomasoquismo es considerado como una “enfermedad sexual” por lo teóricos y terapeutas más conservadores, sin embargo, me atrevo a decir que sólo requerirá tratamiento en caso de tener implicaciones legales o si estuviera ocasionando molestias sociales o bien disconfort en la relación de pareja.

Esta manifestación comportamental está compuesta de dos fenómenos que se pueden presentar individualmente, como lo son el sadismo y el masoquismo.

El sadismo hace referencia a la conducta sexual por la cual la persona SÓLO obtiene placer sometiendo o generando dolor a otra. El masoquismo es todo lo contrario y se presenta cuando una persona goza de ser maltratado.

Esto debe ser practicado con un acuerdo de límites y normas preestablecido, pues nadie querrá que lo maltraten más de la cuenta, o que le generen más dolor del que pueda soportar. Es por ello que un sádico no podría vivir solo. Debe encontrar a un masoquista, o jugar con los dos roles, comportarse a veces como sado y a veces como masoquista. El intercambio de roles de poder es muy frecuente, aunque con el tiempo la persona va definiendo el rol que más le gusta.

El sadomasoquismo es quizá la manifestación sexual más promovida comercialmente y que menos rechazo genera en la sociedad. Sino fuera así, muy probablemente el manager de Alejandra Guzmán no le hubiera permitido sacar en su último video: Lipstick, imágenes sadomasoquistas:

O qué tal el último de Shakira, Las de la intuición:

¿Se imaginan un video musical con otro tipo de imágenes referidas a otros comportamientos sexuales como necrofilia, coprofilia o pedofilia? Simplemente generaría repugnancia y sería vedado, por algo es que los videos de este tipo se consiguen en el mercado negro y bajo cuerda.

La cultura leather, homosexual y heterosexual, también ha estado muy ligada al sadomasoquismo, recreando códigos hipermasculinos y empleando el cuero como signo de identidad. Películas como The Wilde Ones (1954), Fireworks (1946), Scorpio Rising (1964), A la Casa (Cruising), han realimentado la creación cada vez más extensa de grupos leather sadomasoquistas en EEUU y Europa.

Las comunidades leather y sadomasoquistas están extendidas actualmente en muchos lugares del mundo y se han organizado en clubes, asociaciones, locales, sitios web, libros, revistas especializadas y nutren numerosos movimientos artísticos (Mapplethorpe, Espaliu, Catherine Opie, Tom de Finlandia, cine porno, The Leather Archives and Museum en Chicago…)

En los años 70, la generación de estos lugares dedicados a las expresiones sadomasoquistas se vuelven de moda (En Latinoamérica estos bares son pocos). Allí se celebraban fiestas y orgías con sofisticados detalles y nuevas prácticas sexuales (back-rooms, slings, fist-fucking), uso de dildos, entre otras.

Dentro de los sex bar sadomasoquistas más populares se encuentran The Catacombs Inferno, Shaws, Club Wicked, Hedonism, Fleshtheater, Secretroom, entre otros.

Los black rooms (habitaciones oscuras para la práctica libre y anónima del sexo) han tenido restricciones legales y muchas de ellas han sido cerradas debido a la proliferación del Sida en el mundo. Por esta razón, las prácticas sexuales de los leather sadomasoquistas han cambiado y se han impulsado al interior de este gremio, fuertes campañas de sexo seguro con medidas de higiene y seguridad como preservativos, guantes de látex, gel gratuitos, folletos informativos, etc.

En Medellín se han generado espacios en los cuales, sin promover el sadomasoquismo, asisten personas con pintas o vestimentas muy sado y son muy tolerantes con estas expresiones, tal es el caso de las rumbas góticas que desde inicio de los 90’s se han venido desarrollando en Medellín; recordemos las viejas rumbas de Barraca y las actuales fiestas del Mexicano.

Si Ustedes desean ir a este tipo de bares y se encuentran animaditos, pueden someterse o ser sometidos por sus parejas o por otras personas que allí se encuentren, o si lo desean, pueden asumir una posición “voyeur” y disfrutar estos espacios de otra manera.

¿Pero qué pasa cuando hablamos de sadomasoquismo? ¿Qué es lo que primero se nos viene a la cabeza? Cuando se enteró del tema de este artículo, ¿se le cruzaron por su cabeza imágenes como cuero, esposas, látigos, entre otras cositas? La asociación de sadomasoquismo con este tipo de objetos, accesorios y vestimenta es casi espontánea, debido en buena parte a las estrategias de comercio y de mercado que emplea nuestra cultura, pues vale aclarar que esta forma de relación humana supera su propia estética.

En Medellín podemos encontrar algunos diseñadores que incluyen dentro de sus colecciones, algunos diseños con características sadomasoquistas, entre los más representativos están: Jacobo Angel, Pablo Velásquez, Insania Gotique y Morf.

El sadomasoquismo representa otra forma de obtener placer. Sana o no, eso lo define la pareja y los alcances jurídicos que pueda tener esta conducta. Sin llegar al sadomasoquismo como “enfermedad sexual” o como única forma de obtener placer, podemos emplear en nuestras prácticas íntimas algunos elementos interesantes que esta conducta nos aporta para el enriquecimiento sexual y de pareja, reduciendo la monotonía e impulsando la innovación, característica tan aspirada por las mujeres de hoy. Como parte de un juego erótico se pueden emplear cadenas y esposas y hacer un simulacro de bondage o amarramiento, emplear artículos de cuero o vinilo, tacones altos, arnés, entre otros.

Estos preámbulos sexuales funcionan en la mayoría de personas debido a que estimulan la imaginación antes del acto sexual y evitan la monotonía. Es una característica de los buenos amantes hacer un buen preámbulo pues esto les garantiza niveles altísimos de excitación de ambas partes y el logro del orgasmo.

Sorprende a tu pareja esta noche, mordisquéale alguna parte de su cuerpo, dale nalgadas, trátala con vigor, generando un poquito de dolor, amárrale un pañuelo sobre sus ojos y…. bueno… pon a volar tu imaginación y a disfrutar se dijo… (Obviamente todo desde el marco de una sexualidad sana, ética y responsable).